10 piezas perfectas para tener un salón al más puro estilo Art Decó

Quien así habla es Catherine Martin, la decoradora de sets ganadora del Oscar por recrear la esencia de la década de 1920 para la versión de Baz Luhrmann de El Gran Gatsby, lanzada en 2013.

La apuesta era arriesgada: mezclar elementos de hoy, como cebras hinchables para la piscina, con la estética de la época, sin olvidar hacer un guiño a los clásicos de la era dorada de Hollywood.

El resultado, sin embargo, fue brillante pues lograba transmitir la mismísima esencia del Art Decó que dominaba los felices años 20: su deseo de exprimir la vida, de apasionarse por la excitante tecnología de aquella primera era de las máquinas, de sintetizar la emocionante velocidad de los nuevos automóviles, de dejarse llevar por todo lo excesivo y palpitante que podía ofrecer el mundo.

Dorados y geometría, los reyes del Art Decó

En los interiores diseñados por Martin se aprecia el lujo y la elegancia que caracterizan al Art Decó, un movimiento que nació a principios de siglo y que hoy vuelve, renovado, a nuestros hogares.

Así, con muebles-joya como el armazón de mesa Betsy, logramos capturar esa alegría de vivir que experimentó la sociedad occidental en el período de entreguerras, cuando todo parecía posible.

Por supuesto, su estructura metálica es dorada, el tono estrella de esta tendencia en la que mandan los acabados en latón -una aleación de cobre y zinc-. Combinada con una tapa de mármol, un material noble donde los haya, encaja perfectamente en este estilo lujoso que fue puramente burgués en sus comienzos.

El estilo geométrico que vemos en el armazón Betsy es otra de las constantes de este movimiento, obsesionado por la simetría, como podemos apreciar en la silla la Kendall, con un toque algo más contemporáneo.

La razón por la que la geometría manda en el Art Decó es que, como ya hemos apuntado, bebe de modelos artísticos de vanguardia: de la simplificación de la forma del cubismo, de la abstracción geométrica y la sensación de velocidad desarrollada por el futurismo.

Esta aparente sencillez combinada con exclusividad es fácil de apreciar en el armazón de mesa Chamberlin, perfecto para una tapa circular de mármol o terrazo, así como en el taburete Mazarin, gracias a su deslumbrante estructura de varillas de acero.

Materiales lujosos y ecos de civilizaciones ‘exóticas’

El movimiento también se dejaba seducir por los motivos del antiguo Egipto

Sus más famosas excavaciones se realizaron justo en los años 20, introduciendo en el mundo un gusto casi místico por civilizaciones lejanas.

Esto se convirtió en interés por todo lo que resultara diferente y exótico, de modo que también bebió del arte mesopotámico, el primitivismo africano y las formas del extremo oriente.

La silla Calie, con su esqueleto puramente Art Decó y su respaldo estampado, es una buena muestra de esto es:

La suntuosidad del estilo se deja sentir también en la riqueza de sus tejidos, que suelen ser pesados y cálidos.

El terciopelo es la textura rey de la tendencia, que podemos adaptar fácilmente a nuestros días gracias a piezas como el taburete Kaiser o el banco DImple

Una lámpara que resume los años dorados de Hollywood

Pero si algo grita “Art Decó” en cualquier interiorismo son las características lámparas metálicas rematadas por esferas de vidrio de color blanco, como la Bishop.

Y todavía más la Montevideo Maxi, que, gracias a su tulipa de cristal labrado, nos introduce de lleno en una época marcada por la exuberancia tan bien reflejada por Hollywood.

La meca del cine adoptó en sus cintas el Art Decó como estilo característico entre los años 20 y los 40 siempre que pretendía evocar opulencia y esplendor, un guiño que nos transportará en casa a la solidez y el brillo de los clásicos.

Art Decó, un toque vintage, elegante y perfecto

Opulento y excesivo, el Art Decó resume como ningún otro estilo la esencia de los locos años 20 y del Hollywood clásico gracias a su uso del dorado y el latón, su amor por la geometría, su mirada a las civilizaciones ‘exóticas’ y su querencia por materiales nobles.

Las nuevas piezas que lo renuevan con un toque contemporáneo aportan un toque de exclusividad de aire vintage a nuestro hogar, sin renunciar al estilo actual.

¿Cuál te llevarías a casa?

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